Esperando la ansiada vuelta a la competencia oficial, que todavía no tiene fecha, el Club CAPRI de Posadas ya cumplió con la primera semana de entrenamientos en todas sus divisionales. Con el profesor Leo Antunez a la cabeza, la escuela de básquet de la institución azzurra trabaja lunes, miércoles y viernes, a partir de las 16, en la sede céntrica de la calle Hipólito Yrigoyen.
“Apuntamos a un trabajo a largo plazo, para que los chicos que hoy son parte de la escuelita formen el equipo en primera división el día de mañana” dijo Antúnez, a lo que añadió “queremos que los chicos estén en los clubes y no en las calles, que se gaste plata en pelotas y zapatillas, no en otras sustancias”.
A inicios del 2020 se había iniciado un ambicioso proyecto bajo la coordinación del profe Leo, con Horacio Santa Cruz como entrenador del Equipo de Primera División y con Hernán de Olivera con el plantel femenino en todas sus categorías, pero la pandemia Covid-19 hizo posponer los planes de dar el salto a competencias provinciales. El proyecto se reordenó bajo el contexto en el que vivimos y ya comenzó a rodar.
La escuelita esta apuntada a niños a partir de los 6 años para socios y no socios del club, porque la idea de trabajo trasciende los intereses deportivos del CAPRI, sino en el crecimiento del deporte de la naranja a nivel provincial. Con todos los protocolos necesarios, se apunta a los trabajos de destreza individual y corrección de técnicas; acompañado por el equipo interdisciplinario integrado por un psicólogo deportivo, nutricionista, y preparador físico. El trabajo está apuntado a brindarles herramientas a chicos desde temprana edad y así prepararlos con una base sólida en el caso que decidan apostar por el deporte como su modo de vida.
“Ojalá que muchos equipos misioneros puedan competir a nivel nacional con una base formada con chicos de la tierra colorada, es muy valioso lo que está haciendo Tokio” sostuvo Antúnez.