En un juego no apto para cardíacos, la albiceleste se quedó con la victoria por 75 a 73 ante Brasil y se consagró luego de 11 años a nivel continental en un juego por demás de emotivo.
Y la Argentina pudo contra todos, un Geraldao Arena repleto, un público en contra, y se quedó con un enorme triunfo por 75 a 73 ante Brasil, para quedarse con la Americup por tercera vez en la historia. Gabriel Deck fue el MVP de todo, el juego y el torneo, con 20 puntos en su haber, acompañado por 15 de Nicolás Laprovittola.
Ante la intención de Brasil de frenar en defensa a Gabriel Deck y Nicolás Laprovittola, con Cristiano Felicio y Leo Meindl sobre ellos, Argentina movió bien el balón y encontró buenos tiros de tres puntos, con 6/12 de larga distancia. En defensa, el equipo albiceleste presionó bien en primera línea y no permitió que la bola llegara a la pintura, para cerrar el primer cuarto al frente por 26 a 14.
Hubo muy buenos ingresos tanto de Leandro Bolmaro como de Nicolás Brussino, agresivos para atacar el aro y con 11 puntos importantes entre los dos, para que la segunda unidad sostuviera la intensidad, ante un Brasil sin movilidad en la ofensiva y sin efectividad de 6.75 (3/14), donde los de Pablo Prigioni apostaban al tiro de Marcelinho, Didi Louzada y George De Paula.
Esto continuó con el regreso del quinteto inicial y una gran movilidad de balón, llegando a una máxima de 15 puntos. Sobre el cierre, la verdeamarela cargó en el rebote ofensivo (5) y Marcelinho Huertas sacó rédito como anotador desde el pick and roll, para acercar al equipo, aunque Argentina llegó al entretiempo con ventaja de 48-38.
En el arranque de la segunda mitad, Vitor Benite apareció en ofensiva para comandar a Brasil, con 7 puntos que pusieron a su equipo a tres de distancia. A pesar de esto, Argentina no se desesperó y, a pesar de algunos minutos con laguna ofensiva (2/8 de tres y 8 pérdidas), se mantuvo al frente a partir de los ajustes defensivos. Así las cosas, los de Prigioni cerraron arriba por 67 a 60.
Benite siguió lastimando, ahora junto a un muy intenso Yago Santos, para un parcial de 7-0 en los primeros instantes del último capítulo, para igualar las acciones. También la defensa brasilera fue más física y no permitió que el seleccionado albiceleste anotara en los primeros cinco minutos. A partir de ahí el partido se hizo un manojo de nervios por ambos lados, de error en error, con defensas bien físicas. En este contexto, en los segundos finales apareció un rebote ofensivo y posterior doble de Deck para adelantar a la albiceleste por 75-73 a 16 segundos del final. Con una defensa final que no permitió anotar a Brasil, el triunfo y el título volvieron a Argentina después de más de una década.
Fuente: Basquet Plus