El nuevo entrenador de Tokio, Agustin Ponissi, charló con Misiones Básket acerca de sus expectativas en la llegada al club posadeño, en uno de los desafíos más importantes de su joven carrera. “Tiene mucha historia y peso, me llena de orgullo que se hayan fijado en mi trabajo”, manifestó el coach formado en Buenos Aires.
Los tiempos en el club Tokio van a 1000km por hora. Claro, es la institución con más renombre en el básquetbol de la provincia y sus exigencias conllevan un periodo distinto al de los demás elencos en la tierra colorada. Por ello tras la salida del histórico Horacio Santa Cruz, los dirigentes del “japonés” acordaron el arribo del joven entrenador, Agustin Ponissi, quien hasta el año pasado ejercía funciones en OTC.
“Mi llegada a Tokio se dio de una manera muy sana. Después de desvincularme en buenos términos de OTC, me llamó Nicolás Fulquet (dirigente) y me contó un poco la situación actual del club. Hablamos bastante y la conexión fue interesante en un montón de aspectos en cuanto a valores e ideas que tenemos en común. Así que a partir de ahí la predisposición de ambos lados estuvo en que se pueda dar esta contratación. Estoy muy contento y valoro mucho que todo se haya dado de manera sana y transparente”, explicó el DT de 28 años nacido en Córdoba pero criado y formado básquetbolísticamente en Buenos Aires.
Sus antecedentes en clubes como Teléfonos, Náutico Buchardo, 9 de Julio de Chivilcoy y OTC fueron claves para que las autoridades del “oriental” apuesten por su labor. “Me habían quedado esas ganas de tener una temporada más en la Liga Provincial, que es muy competitiva y que está creciendo producto del buen trabajo que se está llevando a cabo. Es muy importante para mi mantenerme en un equipo competitivo en un certamen que promete”, resaltó Ponissi, quien conquistó con el “celeste” obereño el torneo Apertura 2019 de Mayores.
“Cuando llegué a la provincia el año pasado fue el primer club que me nombraron como el más importante en la Liga, tanto en formativas como en primera. Es un club que tiene una rica historia y que ha tenido un entrenador como Horacio Santa Cruz que ha trabajado muy bien y es una gran persona. Sé que tiene un grupo de personas que están en la parte directiva que tienen los valores muy marcados, saben muy bien lo que quieren y conforman una familia muy grande junto con los jugadores, que siempre fueron muy respetuosos conmigo cuando yo estaba en otro equipo”, subrayó.
El cordobés llegará el lunes a la capital misionera para comenzar a delinear el proyecto 2020 en la entidad de la calle Belgrano, donde estará a cargo de las divisiones formativas y primera división. “Mi idea es sumar a lo que “Cabeza” (Horacio Santa Cruz) venía haciendo muy bien, así que quiero potenciar lo que ya tiene el club. El objetivo es competir en la provincia y también en el país”. Y añadió: “Las expectativas cuando uno entra a un club como Tokio siempre son muy grandes. Es una institución con mucha historia y con un nivel de competencia no solo provincial sino nacional. Ilusiona mucho. Me genera un entusiasmo muy importante y es un desafío para mi carrera al ser un entrenador joven. Yo creo que va a ser un gran año”.
Para finalizar Agustín dejó en claro que entiende la responsabilidad que conlleva dirigir el destino deportivo de la institución más ganadora de la provincia. “Sé que estoy entrando en una gran familia, en un club muy importante que tiene también mucho peso y me llena de orgullo que se hayan fijado en mi trabajo. Todo esto me genera mucha expectativa e ilusión y es un desafío como entrenador de estar a la altura de lo que el club merece para que siga siendo aún más grande”.
