De chico soñaba con ser jugador de Fútbol y estaba enamorado del arco, los Juegos Deportivos Misioneros lo acercaron a distintos deportes como el Atletismo o la Boccia; pero cuando la naranja llegó a sus manos quedó cautivado. Lisandro Zarza vive hoy un sueño, cumple su primera concentración con la Selección Argentina U21 de Básquet Adaptado y contó sus sensaciones a Misiones Básket.
-¿Cómo estás viviendo esta primera convocatoria a la selección?
-Lo estoy viviendo bien, tranquilo con la mente enfocada en el entrenamiento y el juego, tratando de cumplir con las cosas que me piden. La idea es cumplir con todo para estar devuelta acá. Vine preparado mental y físicamente al 100%.
-¿Trabajaste para esto o es algo que se dio?
-Cuando empecé siempre mi meta fue llegar a ser el mejor jugador que podía ser para ayudar a mi equipo. Siempre enfocándome más en lo grupal adentro y afuera de la cancha que en mi mismo. Pero cuando me comentaron que me estaban viendo desde la Selección me enfoque de lleno para estar. La verdad que es un sueño, después de cosas que no se dieron, viajes que no pude hacer pero ahora se dio y lo disfruto al máximo.
-¿Qué sentiste cuando te pudiste la ropa que decía ARGENTINA?
-No puedo explicar con palabras lo que sentí o pensé. Una señora repartía la ropa y me dieron las camisetas alternativa y la titular. La celeste y blanca con la palabra Argentina en el pecho….
Tras una pausa para reordenar su mente y desatar el nudo de la gargante, Licha retoma el aire y cuenta que
– Cuando me puse la camiseta me largue a llorar, agache la cabeza y simule que me secaba la transpiración, pero en realidad lloraba porque estaba cumpliendo mi sueño y no podía creerlo. Una vez que me puse esa camiseta sabía que nada me podía afectar, ni un golpe, una caída…nada. Valía mucho más la pasión y las garras que le pongo a todo y con las que llegue hasta ahí.
-Jugaron un partido con los mayores, contanos que paso ahí…
-Fue contra un equipo mixto, se mezclaban los planteles de la mayor y nosotros los U21. Cuando me tocó entrar no me achique para nadie y jugué como siempre, no me importó a quien tenía enfrente. Cuando terminamos en el saludo final con todos Daniel Copa (Referente de la Selección Mayor) me agarró fuerte la mano, me miro a los ojos y me dijo “Felicitaciones pibe, la verdad que me sorprendiste, seguí así que vas a llegar lejos”. Me dejó sin palabras
-¿Podes dormir con todo esto que te pasa?
-Soy una persona que repaso mucho las cosas que hice en el día, cada jugada, los errores que cometí, si había una mejor opción o decisión…todo. Más allá de eso si duermo tranquilo, pero no puedo pensar tanto porque si no se me pasa la hora y al otro día temprano hay que volver al trabajo.
-¿Qué significa que tu papá te acompañe?
-Mi papá me dijo que está muy contento y orgulloso. Que él también soñó como todos con jugar en la Selección y que se me esté dando a mi es increíble. Y también están orgullosos mi mamá, mi hermana, mi abuela, mis tíos; todos los que quedaron en Posadas tirando buena onda y rezando para que me vaya bien . Todo eso me emociona mucho y me da fuerzas para seguir luchando y ganarme el puesto.
Lucha, superación, convicción y actitud; virtudes de un jugador que en la cancha le puso la misma garra que en la vida y eso está dando sus frutos.