Corría el año 2011 cuando Eldorado fue sede del Campeonato Argentino de Básquet U17, donde El Coati fue el anfitrión y llegó integrando el plantel del Quimsa de Santiago del Estero un adolecente Gabriel Deck de apenas 16 años. El Tortu ya sobresalía entre los suyos. La historia de un misionero que tuvo la difícil tarea de defenderlo.
El alero de la selección Argentina y Oklahoma City Thunders ya pintaba como crack, fue el goleador de su equipo y del torneo en aquel certamen. Más allá de su sobresaliente papel durante todo el certamen, quedó en la anécdota que Quimsa perdió los tres encuentros que jugó ante los dueños de casa.
La histórica foto queda para la posteridad, con Tadeo Flores como el hombre encargado de “anular” al goleador de la visita. “Miro esa foto y me causa risa, me acuerdo que tenía miedo que me pase fácil y me la vuelque en la cara” le dice entre risas a Misiones Básket del otro lado del teléfono el jugador oriundo de Capiovi.
“Ese partido (el de la foto) definíamos el tercer puesto del torneo, tengo un lindo recuerdo porque levantamos 15 puntos de diferencia y subimos al podio”, rememora Tadeo de aquella visita del sub campeón del mundo 2019.
Apenas había iniciado el torneo todos hablaban del juego del Tortu. “Lo que más me sorprendió era el talento que ya tenía. El dominio de pelota era increíble…podía jugar en cualquier posición”, contó.
“Cuando él (Gabriel Deck) pasó de San Lorenzo al Real Madrid hablábamos con los chicos de aquel plantel que un poco nos sorprendió, aunque sabíamos que podía llegar. Pero después de su performance en el Mundial 2019, más el halago de Kobe Bryant, volvimos a hablar y ahí decíamos que le faltaba muy poco para llegar a la NBA”, recordó el ex jugador de las formativas de El Coati.
Las cosas del destino y las casualidades hicieron que la noticia del traspaso de Deck a la NBA le llegue de una manera muy particular. “Hace unas semanas fui a la casa de mi papá y estábamos mirando TV, ahí vimos la noticia que Deck cerró con Oklahoma. Mi viejo me preguntó si es el mismo Gabriel Deck al que nosotros le habíamos ganado tres veces”, cuenta antes de soltar una carcajada. “Con orgullo le dije que sí, porque es un hermoso recuerdo haber compartido cancha con ese monstruo”, cerró.
Un año más tarde al Chango lo ascenderían al plantel de primera, pero esa ya es otra historia…
Fotos: Gentileza Miguel Mendieta.